En una familia narcisista, la relación sana entre hermanos y padres no existe. Del mismo modo, los hermanos entre sí difícilmente podrán llevarse bien, ya que sus modelos y su crianza sólo habrán favorecido la rivalidad malsana, los celos, la envidia, la comunicación manipuladora y, en casos extremos, el odio.
Chico/a de oro versus chivo expiatorio
- El «golden child» o niño/a de oro
En la familia narcisista, los padres establecen y expresan diferencias entre sus hijos, y suelen tener uno al que consideran como su “sucesor” (en inglés se conoce a esta figura como el Golden Child, “niño de oro”), y a otro como aquel que lo hace todo mal y causa todos los problemas. Por tanto, el que será objeto también de constantes reproches, críticas y estallidos de ira.
- El chivo expiatorio
Este es conocido en inglés como “Scapegoat”, literalmente chivo expiatorio. No hace falta resaltar el enorme malestar y sentimiento de inferioridad que esto genera en los niños. El designado como chivo expiatorio tiene una vida muy difícil, porque nunca, y hay que repetir esto con insistencia, nunca podrá acertar: todo lo que haga estará mal a ojos del narcisista.
Estos roles pueden cambiar según las circunstancias, pero en general siempre habrá uno que tenga que ser tratado con más dureza y sobre todo que cargue con las culpas de todo, mientras que otro siempre será disculpado y favorecido en todos los ámbitos.
En la familia narcisista no hay trato justo
Especialmente en el ámbito de la economía y de las ayudas: lo mismo que se le niega al chivo expiatorio se concede sin problema e incluso se ofrece al favorito: estudios, viajes, dinero en efectivo, coches, ayudas mensuales… todo es poco para él o ella, mientras que al chivo expiatorio se le puede negar hasta cierta comida, porque resulta cara.
Recuerdo que en mi casa cuando éramos pequeños, mi hermano comía una comida diferente a las chicas, que comíamos algo más barato.
El niño perdido
¿Y cuándo son tres? ( o más) Pues aparece un tercer rol que es el del niño o niña perdido/a. Como su nombre indica, es esa criatura a la que no hacen caso. No se le presta atención, ni positiva ni negativa, y con frecuencia desarrolla el papel de bufón, o de cuidador/psicólogo, o de ambas.
Su lucha es por encontrar su propia voz, y por conseguir despertar el interés de alguien en la familia, normalmente sin éxito.
Como se puede adivinar, cada uno de estos roles es disfuncional y dificil de llevar, pero hay uno que es más fácil que los otros, claramente: el o la chica de oro. Al menos, el hijo que está en ese posición no siente que su vida sea difícil durante la infancia en la familia narcisista.
Los otros dos, por su parte, tendrán que luchar ya desde bien pequeños contra mucha adversidad y sufirimiento psicológico. Y, además, la diferencia con el chico o chica de oro aumentará su mala experiencia. Años más tarde, cuando todos los hijos ya son adultos, la manera en que ven a los padres y recuerdan la infancia no tendrá nada que ver una con otra, aún habiendo compartido la misma casa y las mismas supuestas normas de convivencia.
Reglas disfuncionales en la familia narcisista
¿Qué conductas se promueven en una familia que gira en torno a uno o más narcisistas?
- No hablar de lo que se siente
- No expresar lo que se necesita (salvo si eres el o la chico/a de oro)
- No disentir ni cuestionar las directrices
- Ser “fuerte” y no dar problemas (de nuevo, el o la chico/a de oro puede hablar de sus problemas)
- No confiar en nada ni en nadie
- Ignorar los problemas, aunque sean tan evidentes como que hay un miembro de la familia tan alcohólico que se cae inconsciente sobre la mesa del comedor
- Nunca hablar directamente las cosas con la persona afectada, utilizar siempre un tercero con el que se habla en secreto (triangulación)
- No llorar ni expresar emociones intensas: solo los narcisistas pueden enfadarse desmesuradamente
Veremos más efectos de la famila narcisista en este post.